sábado, 12 de marzo de 2016

Oda a la siesta

Es un sueño reparador,
una dulce agonía,
la mejor parte del día
que me pone de buen humor.

Es un sueño corto,
aunque algunos lo alarguen,
media hora sirve
o diez horas de margen.

Es un sueño, mi siesta
cuan fa la calor,
honesta respuesta
pa' todo dolor.

Recién comido, señor,
con el estómago lleno,
se agudiza el ingenio
y se duerme mejor.

O si no la del borrego
justo antes de comer,
un sueñecito pa' hacer
en la tripa un buen hueco.

Pasa ya el mediodía
ya no hay na' que emprender
así que creo desfallecer
en mi siesta de fantasía.