domingo, 11 de diciembre de 2016

Pura droga

Pura droga.
Tus besos son pura droga.
Una tan potente
a la que me enganché en la primera toma.

Una tan penetrante
que hasta mis células perdieron su forma.

Y me siento afortunado
por compartir hasta mis partículas
de aire,
diciendo cosas ridículas
que nadie
entendería sólo tú,
mi campanilla,
que soplas tus polvos mágicos
en mi cara,
y me sacas a volar en tus labios.
Y a la orilla
de tu mejilla sonrojada
hay palabras,
que no es una mujer sencilla
pero nada,
porque no hay maravilla
sin problemas.
Y en tu mirada,
azul como el océano
este poema
se escribe solo, no hay dilemas,
sólo un lema,
Hakuna Matata libre,
y en mi yemas
de mis dedos los masajes
hacen gárgaras.

Porque tu garganta...
... también es pura droga.